¿Cómo la herbolaria es realmente parte de la medicina basada en la ciencia?
Como estudiante en el área de ciencias biomédicas, químicas y de salud, determinar la dosis de un medicamento obedece las sabias palabras de Paracelso: “Nada es veneno, todo es veneno, la diferencia está en la dosis”.
para L.W.
“No teníamos nada: sólo hambre, sólo frío… Ni siquiera sabía si eran alimento o veneno. Pero sentía que me hablaban. Después de comerlos oí voces. Voces que venían de otro mundo”
María Sabina

Las plantas medicinales son una fuente importante tanto de fármacos sintéticos y como de fármacos naturales, y se han utilizado para el tratamiento de enfermedades desde la antigüedad.
India, China y México son referencias de la historia de los medicamentos a base de hierbas. Los medicamentos a base de hierbas han sido producidos por varios investigadores de renombre. Antes del químico, antes del alquimista, antes de que los medicamentos sintéticos estuvieran disponibles, los humanos usaban jugos, polvos, infusiones, (en realidad se consideran formas de farmacéuticas o formulaciones). Esto está completamente documentado a lo largo de la historia. Podemos buscar en la base de datos de usos etnomedicinales de la Universidad de Illinois aproximadamente 9200 especies de plantas con propiedades fitoterapéuticas.
Por otro lado, la farmacología como disciplina académica, y su aplicación en la atención médica ha cambiado casi sin reconocimiento. Con el resurgimiento del interés por los fármacos naturales, la fitoterapia y los remedios herbales, están emergiendo nuevos caminos para los estudiantes de farmacia, medicina, herbolaria médica, química, enfermería y profesiones relacionadas.
En el siglo XIX, el conocimiento sobre ciertas plantas derivó en la expansión de las drogas; Las propiedades farmacéuticas de las plantas se deben a moléculas aisladas y se han caracterizado algunas como: morfina, quinina, salicina, entre otras; esa “nueva” investigación ahora se llama Química de los Productos Naturales; o específicamente para plantas, fitoquímica; Se aislaron entidades químicas puras y se dilucidaron sus estructuras. Uno de los principales logros de la ciencia del siglo XIX en el campo de las plantas medicinales fue el desarrollo de métodos para estudiar los efectos farmacológicos de los compuestos y extractos.
La última parte del siglo XX vio una rápida expansión en el conocimiento de productos de origen natural secundarios, su biosíntesis y sus efectos biológicos y farmacológicos, se introdujo una gran cantidad de productos naturales o sus derivados como medicamentos, incluidos muchos agentes anticancerígenos (paclitaxol, alcaloides de la vinca), el agente antipalúdico artemisinina y la medicación antidemencia galantamina, entre otros.
La etnofarmacología es un campo de investigación que analiza el conocimiento empírico de los pueblos indígenas sobre las sustancias medicinales y sus posibles beneficios para la salud, y los posibles riesgos toxicológicos asociados con tales remedios, la fitoterapia indígena es un factor importante que influye en el uso de plantas medicinales en el mundo occidental , pero solo unos pocos compuestos están suficientemente bien estudiados con bases biocientíficas o clínicas.
Como estudiante en el área de ciencias biomédicas, químicas y de salud, determinar la dosis de un medicamento obedece las sabias palabras de Paracelso: “Nada es veneno, todo es veneno, la diferencia está en la dosis”. Debemos recordar que las plantas contienen múltiples compuestos, no solo terapéuticos, como las xantinas asociadas con enfermedades. Es un hecho que la medicina tradicional y la herborlaria son formas primarias de conocimiento farmacéutico, no debemos ver la herbolaria como una disciplina separada de la medicina, sino como una disciplina entretejida en los diferentes campos de las ciencias de la salud.
Referencias:
- Feng-Lin Y., Tzu-Hui W., Liang-Tzung L., Thau-Ming C., Chun-Ching L., Food Chem Toxicol. 2008,
- Heinrich, M., 2012. Fundamentals of Pharmacognosy and Phytotherapy. Elsevier Health Sciences.
- Singh, A., 2011 Herbalism, Phytochemistry and Ethnopharmacology. CRC Press. New York.
Comparte en redes:
Deja tu comentario:
Responsable de esta nota:

Coolaboradora de contenidos de RSJ.